*Foto intervenida
¿Me acompañas amor, a una fiesta de
máscaras, la noche de brujas? Él parecía no escucharla, pues siguió bebiendo su
cerveza, ahí en la barra , atento a la canción que Fito Páez cantaba en la pantalla gigante: "Estas
en el club Calavera /En el refugio Monteagudo te abrazan con el corazón/ Fui a
cantar una noche con el piano /Y un cartel escrito con dolor decía que la calle
no es un buen lugar/ Para vivir, mucho menos para morir/ Transmítelo,
transmítelo /"
-Amor, ¿me escuchaste? -
-Claro que te escuché, y tú ya sabes lo
que pienso al respecto. Esa fiestecita gringa no me entusiasma ni un poquito.
-Pues voy a ir de todos modos -le enfatiza
la mujer, con un brote de lágrima-Los amigos de la empresa vamos a montar una
comparsa parodia de la muerte.
-Ve tranquila a tu fiesta de brujas - le
dijo tiernamente. Yo prefiero el bar. Aquí se dan situaciones, que bien valen la
pena para un buen reportaje de la noche (asomó su alma de periodista)- Le dio
un beso. Salieron a la Gran avenida, y tomaron sendos taxis que, los llevarían
a sus apartamentos.
El primero de noviembre, El tabloide, estremecía la tranquilidad de la Gran avenida con la nefasta noticia: "Joven periodista, baleado a la entrada de bar La treinta, la noche de brujas, por una comparsa de la muerte.