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lunes, 8 de noviembre de 2021

La piel de la ciudad

 






Foto propia intervenida


Husmear en las grietas de la ciudad

si envejece la piel.

Ver como cae el zócalo del viejo teatro

a donde los novios buscaban los palcos

para reencontrarse en sus bocas ansiosas,

en sus manos apretadas de deseo

cuando se apagaban las luces.

Mirar cómo la ciudad ha perdido su rostro,

en el derrumbe de las viejas casas,

aquellas que hablaban del amor a la madera

en las puertas

taraceadas por viejos artesanos.

La ciudad se fue quedando sin indicios

de su historia,

aquellos monumentos que hablaban de ella,

los deshabita el recuerdo.

La ciudad de ahora no habla, híbrida de modas,

de arquitectura moderna vacía, monólogo de edificaciones,

calles donde nadie se entiende, cada uno es un mundo,

y si hay lenguaje el del arma afilada,

(“bájese del"billo, hermano")

o el "fierro” que escupe la muerte,

("de algo hay que vivir, parce, así sea

matando")

Tampoco  nada queda del sendero aquel

camino del salto de agua que, caía hecha espuma,

sobre nuestros cuerpos desnudos

liberando el deseo

de las ataduras del pecado.

Hasta el pecado dejó de ser pecado


46 comentarios:

J.P. Alexander dijo...

Reflexivo poema, es triste como las ciudades se destruyen al igual que como sociedad nos matamos poco a poco. Te mando un beso

carlos perrotti dijo...

Cuando nuestra ciudad (o sociedad) pierde la memoria se deteriora su personalidad, tambalea su dignidad y confunde su destino...

Un poema que deja pensando, amigo. Abrazo hasta allá.

Alfred dijo...

El pecado se nos fue de las manos uns noche de tormenta por nosotros no provocada.

Abrazo.

Albada Dos dijo...

La degradación de las ciudades, algunos cascos viejos están en estado lamentable, nos recuerda que fuimos jóvenes.

Ahora todo ha cambiado. Un abrazo

Dionisio Álvarez T. (DAT) dijo...


Hola Carlos, con estas metáforas en las que describes como crepita la ciudad; nos envuelves con cierta tristeza, en esa realidad que se generaliza cada vez más y nadie es de ningún lugar y todos nos fundimos en una confusión de lenguajes y formas parcas en desafectos. Gracias por todo ello.
Un abrazo

retazosmios dijo...

Cuanto de verdad en tu poema amigo Carlos, por desgracia las ciudades poco a poco van perdiendo su identidad y con ella lamentablemente su memoria. ¿Cuándo aprenderá el ser humano a comportarse como tal?
Un gran abrazo amigo desde la distancia.

ETF dijo...

Amo la piedra vieja, la casa vieja, la librera vieja, las lámparas viejas, los muebles viejos, las maderas viejas ... que bello es sentir el valor de lo viejo.
Me hiciste recordar mis viejos paseos por el barrio viejo de mi ciudad, de cualquier ciudad, donde poner la mano sobre las piedras de cualquiera de sus casas, cerrando los ojos, puedes saborear toda su historia.
Comprendo ese sentir .. y lo comparto.
Un abrazo.

Mari Carmen dijo...


Estamos perdiendo el encanto y señas de identidad de nuestras ciudades, creo que es extensivo a todos los lugares, y lo siento.

Un abrazo.

Amapola Azzul dijo...

Bonito texto muy metafórico.

Besos.

Macondo dijo...

A los que nos han educado con el catecismo, lo de que el pecado haya dejado de serlo ha supuesto toda una liberación.
Un abrazo.

Verónica O.M. dijo...

Lugares llenos de belleza que con el tiempo se han degradado y ya no vemos igual.
Un abrazo.

Isa dijo...

Hola Carlos, buen escrito. Es lamentable que todo se vaya deteriorando y los políticos no pongan solución para arreglarlo. Se deterioran edificios emblemáticos, hogares donde antes vivían familias que huyeron del acoso de otros. Se deteriora las relaciones entre humanos. Nos vamos cargando los espacios donde antes éramos felices. Menos mal que el pecado ya no es pecado aunque nunca lo fue, no el pecado de probar el sexo consentido.
Abrazos amigo Carlos

mariarosa dijo...

Las ciudades y sus historias cambian, aquellos rincones donde el viento escribía en las paredes ya no existe, solo queda el recuerdo en nuestra memoria. Bello y evocador poema.

mariarosa

Kasioles dijo...

Una bella reflexión poética que solo podemos hacer aquellos que ya tenemos unos años y comprobamos que lo que en un día formó parte de nuestras vidas, actualmente se ha convertido en un añorado recuerdo.
Te confieso que algo parecido me ha pasado a mí con mi tierra gallega ¡Menos mal que han sido incapaces de absorber toda el agua del mar para levantar torres de apartamentos donde ya es imposible conocer a los vecinos.
La mayoría de los cines llenos de recuerdos, palabras de amor en tono bajito, una caricia robada con las luces apagadas, hoy son grandes entidades bancarias que no sé muy bien lo que guardan, pues la gente cada año que pasa va perdiendo poder adquisitivo, en fin, que no tiene un duro que poder ahorrar.
Y como hay que continuar renovando, lo antiguo se elimina por viejo, porque ya no está de moda y no se dan cuenta que están matando el encanto, con solera, que fue adquiriendo la ciudad con el paso de los años.
Y como broche de oro concluyes tu poema con este verso:"Hasta el pecado dejó de ser pecado"
A mi felicitación por esta tan acertada y preciosa entrada, une mis cariños junto con mis mejores deseos tanto para ti como para tu hermana.
Kasioles

A. dijo...

Y con ello matan el encanto de nuestras ciudades y pueblos, dejándolas vacías de encanto e historia!

Un abrazo

Rocío G. Tizón dijo...

Qué bellas esas ciudades con alma propias.
Un abrazo.

Gra dijo...

Hola Carlos, este texto me dio un poco de nostalgia, pasan los años y creo que todo cambia, son muy pocos los edificios que se conservan y restauran, pero si aca en Baires hay muchos cines que fui cuando era chica y despues mas grande con mi novio, que hoy fueron reemplazados por shopping o Galerias de compras, o como el Gran Splendid que hoy es la libreria mas importante de sudamerica, es hermosa.... "YENNY, EL ATENEO"
https://www.youtube.com/watch?v=lbkGtfiRmt0
Ya nada queda de esa Ciudad testigo de esos amores de juventud...
Un gran abrazo Carlos que tengas un lindo dia!!

Beatriz Martín dijo...

uuuff lograste que viajara a mi Caracas, donde tengo tanto rincones llenos de algarabía y de amor, me dicen que si regreso está totalmente desdibujada ha desaparecido su rastro, gracias hermosas y profundas letras , un abrazo desde mi brillo del mar

Recomenzar dijo...

Me encantan tus pecados
dispersos en los adoquines del pensamiento de las calles
Bravo Muchacho.
Felicitaciones!!!!

Jo dijo...

Todo eao que describes... se extraña en presencial ;)

SÓLO EL AMOR ES REAL dijo...

Absolutamente cierto hermano, eso tan triste que narra es lo que va quedando de nuestras ciudades

Paz

Isaac

Solo Yo dijo...

En las ruinas todavía se oyen los susurros y se recuerdan las caricias!

Sandra Figueroa dijo...

Que triste es ver que todo va cambiando, que nada queda de aquellos bellos lugares que atesoraron besos, amor, suspiros..... lo actual es mudo..... Saludos amigo Carlos.

Cabrónidas dijo...

Las ciudades son ahora cómodas tumbas deshumanizadas cargadas de tecnología.

Rainbow Evening dijo...

you are right...
very sad

Verónica Calvo dijo...

Carlos, qué buena reflexión versalizada.
Es cierto que todas las ciudades se parecen. Será la globalización, que despersonaliza todo.
Al menos todavía podemos disfrutar del corazón de cada lugar, ahí donde sigue estando su espíritu único.
Y sí; hasta los pecados han cambiado.

Abrazo.

hanna dijo...

Las ciudades se deterioran como su historia,sus costumbres,hasta se pierde el encanto. Tus letras llegan muy hondo describes tristeza e indiferencia. Un abrazo grande.

La utopía de Irma dijo...

Desgraciadamente las ciudades cada vez son más grises.

Abracines utópicos.-

Manuel dijo...

Precioso y profundo poema, donde dices verdades como templos; y lo peor, además de perder sus encantos las ciudades con tanto hormigón y acero, es que las personas también se están deshumanizando en cuanto a las relaciones sociales, y se están volviendo indiferente al dolor de los demás.
Un fuerte abrazo, amigo Carlos.

Majo Dutra dijo...

Um tema muito interessante, muito bem abordado e poetizado.
Concordo contigo: as cidades estão, cada vez mais sin carácter,
perderam a poesia dos seus recantos antigos.
Felicitações por esta inspiração. Foi um prazer ler-te.
Tem um feliz fim de semana. Abraço amigo.
~~~~

Ricardo Tribin dijo...

Te dejo la ciudad sin mi, bella cancion de Mario Garena.

Excelente, tu post.

Abrazos grandes, querido Carlos Augusto

ANNA dijo...

Muchas gracias espero que estes bien de salud
precioso y profundo poema
cuidate mucho
Besos

Frodo dijo...

Tratan de borrar la historia de las ciudades e implantar una nueva, pero confío en que el amor y la memoria resurgirán entre los poros de esa piel, aunque los violentos y los malvados hoy tienen mejor prensa y son bien vistos.

Abrazos desde una Buenos Aires rara, pero queriendo volver a ser algo de lo que era, querido CArlos.

São dijo...

Nem imaginas como me revejo neste teu belo poema....

Beso, bom fim de semana

Luiz Gomes dijo...

Boa tarde Carlos. Faço de tudo para divulgar um pouco da identidade das cidades que eu visito.

María dijo...

Es una maravilla las metáforas que utilizas en tus versos, siempre me impresionas, y esta vez, no ha sido distinto. Desde la primera frase a la última.

Lo que da pena es cómo está cambiando todo. Cuando antes los novios buscaban los rincones de un cine, o un palco, una calle, un árbol para besarse y acariciarse a la luz de la luna o de esa ventana donde refleja el cristal a los enamorados. Parecía ciudades mágicas y románticas con los enamorados. A dónde hemos llegado. Ciudades llenas de desencanto, de poluciòn, de humos, estamos matando la naturaleza.

Me ha encantado tu poema y la imagen. Un gusto estar aquí.

Un abrazo, poeta.

don dumas dijo...

Describes la decadencia de la ciudad con tu gran estilo, como ese árbol que llega al otoño y es abandonado por las hojas que le dieron belleza y esplendor.
Las ciudades son híbridos de espíritus pero sin alma.
Me ha encantado tu realismo poético

Abrazo Carlos

Gracita dijo...

Olá Carlos
Com belas e intensas metáforas retrataste o que sentimos e não conseguimos exprimir
Um maravilhoso fim de semana
Um abraço

Laura. M dijo...

Así es Carlos grandes verdades en tus versos. Todo cambia amigo y muchas veces a peor. No solo las ciudades, también las relaciones entre humanos. Espero que no olvidemos esa piel de las ciudades que saben también guardar su historia y tan mal las cuidamos.
Buen domingo.
Un abrazo.

José A. García dijo...

De una forma u otra, lo queramos o no, el tiempo (se) pasa.

Saludos,
J.

Majo Dutra dijo...

Desejo que te encontres bem, Carlos. Tem uma boa semana. Abraço da maria josé.
~~~

Manuela Fernández dijo...

Las ciudades han cogido una velocidad que nos dejan atrás a los ciudadanos.
SAludos.

Graça Pires dijo...

"Somos, na cidade, os viciados de um pseudo-conforto que nos inibe de sonhar". Muito reflexivo, o seu poema.
Uma boa semana com muita saúde.
Um beijo.

Joaquín Galán dijo...

Es lo que nos trajo la globalización,todos iguales,fuera identidades. Y es una pena porque en esa identidad propia de cada lugar del planeta estaba contenida la belleza.

Galilea dijo...

Te quedó muy hermoso ❤

Jennifer Davison dijo...


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