Vistas de página en total

martes, 21 de abril de 2020

Cuentos de pandemia: bolero para una saga de amor

 · 



*Foto de internet intervenida


"Para que me sirve el alma /si la tengo ya amargada /si su vida idolatrada,/ por traiciones la deje...", el viejo bolero de Los Panchos suena como un eco interminable en el minicomponente. Y un frío helado, que entra por la ventana abierta y sin cortinas, se queda en el adusto piso, como una escarapela incómoda, pero al hombre, sentado en la mitad del cuarto en una silla roñosa, y con un revólver empretinado, parece no molestarle. Bebe como náufrago, a pico de botella, un aguardiente aniquilante, lo llaman "mataburros". Cuando el minicomponente, deja escuchar "para que sirve ser bueno,/ si se ríen en tu cara, /que me lleve la corriente, /que me lleve la corriente, /atrás no regresaré", el hombre como un resorte, se saca el revólver de la pretina, y aprieta el cañón contra su sien. La mancha roja en el piso, nunca la pudieron borrar.



32 comentarios:

Paula Cruz Roggero dijo...

Muy buen relato Carlos, es la primera vez que leo algo tuyo que no sea poesía y me gustó por la brevedad con la que expusiste todo un tema y lo cerraste.
Besos al alma, muakkk.

Macondo dijo...

Tan bueno como duro, Carlos.
Un abrazo.

Manuela Fernández dijo...

Cada momento en la vida tiene su canción. O quizás sea lo contrario.
SAludos

Laura dijo...

Duro relato que me mantuvo pegada a la silla. Un abrazo Carlos.

CHARO dijo...

Trágico relato...prefiero la bondad de una persona que no es motivo para que nadie se riá de ella y si alguien lo hace demuestra ser muy poquita cosa.Saludos

Carmela dijo...

Un corto, impresionante.
Un beso

mariarosa dijo...


Dios, que bien relatado. Le has dado ambientación y el dolor del hombre y su miseria se ve claramente.

Muy buen relato.

mariarosa

Alís dijo...


Ya el título me fascinó, como la promesa de un amor intenso. Y es que escuchar un bolero triste tomando "mataburros" augura un final trágico. La presencia de un revólver cerca completa la escena de lo inevitable.

Un abrazo

Sandra Figueroa dijo...

Un sentir que termino en tragedia, como muchos casos parecidos hay por el mundo...... Ese bolero me encanta asi mismo tus letras. Saludos amigo.

Julia López dijo...

Una mala decisión, en la que nunca hay que pensar por muy desesperado que se esté.
Un abrazo desde España

A. dijo...

Trágico relato ahogado en sus penas.
Abrazos cariñosos.

la MaLquEridA dijo...

Tan actual con virus y sin él.

Un abrazo Poeta

Isa dijo...

Hola Carlos. Madre mía, esto si que es una muerte causada por uno mismo. La desesperación nos lleva a estos actos.
Un relato muy fuerte y penoso.
Abrazoss. Cuídate mucho

Verónica Calvo dijo...

Quedó como el recordatorio del interior de tantos.

Un abrazo, Carlos.

SÓLO EL AMOR ES REAL dijo...

letras poderosas y difíciles...

Paz

Isaac

Graça Pires dijo...

Uma narrativa trágica nestes tempos tão inquietantes…
Um bom fim de semana com muita saúde.
Um beijo.

A Casa Madeira dijo...

Bom... são reflexões e palavras muito difíceis mas
com certeza penso que existe explicação; até para
que serve uma alma;
Pensei que o suícidio que presenciei a anos atrás fosse a coisa mais cruel;
Então agora vem o covid e percebo que tudo que era grande de enfrentar
ficou pequeno.

Com certeza esse virus a natureza simplesmente devolveu
o que o ser humano faz com ela a anos e agora esta fazendo ela mesma a seleção.
Mas enquanto a melhora não vem a melhor coisa a se fazer é se cuidar.

Você citou Mercedes Sosa, sempre tive muita reverência por esta artista eu e o mundo k.
E acima de todos os nossos anseios e de nossas inquietações a uma criação que tudo o sabe
tudo o vê e se permite que seja assim é porque é preciso.
Abraços a ti e para os teus e obrigada pela sua presença pela casa k;

Himawan Sant dijo...

I was stunned to read the end of the story.
Your imagination is strong.

Greetings from Indonesia, Carlos

Frodo dijo...

Ufff guión de cine, o de serie.
En cuanto aparezca algo así, cuando empiecen a hacer las películas sobre la cuarentena, voy a decir "¡eso ya lo escribió el gran Carlos AUgusto!

Espero tengan la dignidad de no robarte la canción del Trío Los Panchos

Abrazos y cuidate querido amigo!

CÉU dijo...

Hola, Carlos!

Una história muy bién escrita en tempos de Coronavírus. Todas las pandemias passaram y esta no será exceção. Mantenhamos un sorriso y fé.
Nunca entendi o suicídio. Un bolero de Ravel, si!

Abrazos e cuidate!

La utopía de Irma dijo...

Bonita historia, todo pasará espero que no se nos olvide pronto.

Abrazote utópico.-

Conchi dijo...

Trágico y muy fuerte relato Carlos ¿Merece la pena el suicidio en cualquier circunstancia de la vida? Para este señor veo que sí.

Un abrazo.

Margarida Pires dijo...

Que palavras tão duras.
Um pouco insanas.
Que a luz volte aos seus pensamentos.
E que regue seu jardim um pouco murcho.
Um abraço.
Megy Maia🌈

Nuria Lourdes dijo...

Cuánta falta nos hace a todo ser humano trabajar en nuestra autoestima, en nuestra salud mental, en amarnos a nosotros mismos... Siendo así no sucederían historias trágicas como la de tu relato.
Te felicito, muy bien plasmado.
Saludos Carlos. 😉

Marina-Emer dijo...

siempre TE RECIBO Y VISITO CON EL MAYOR CARIÑO ...HOY ENCERRADA CON MIS CHICOS TENGO EL GUSTO DE VISITARTE Y DEJARTE UN GRAN ABRAZO Y BESOS.
MARINA

Clarisa T. dijo...

Otra forma de afrontar una pandemia y no tan lejos de la realidad. Aunque nos se difunde, sé de casos de suicidios debido a estos momentos, y en diferentes lugares del mundo, pero donde más en la propia China donde surgió. También en otros lugares. No podemos imaginar lo que ocurre en una mente cuando toma una decisión tan drástica.
Tu relato mueve la conciencia, remueve cosas que no queremos, tal vez, mirar. Lo duro no es lo que se cuenta, sino el efecto que nos produce. En psicología decimos que, "cada persona, cada mente, es un terreno imposible de explorar por completo. Somos seres desconocidos hasta por nosotros mismos. El resorte que nos hace saltar, nunca está visible y siempre es un misterio".
Gracias por la reflexión que suscita este relato, duro, a raíz de las imágenes que deja.
Abrazos.

Recomenzar dijo...

me gusta cuando callas y te escucho en silencio y tus labios me besan mientras toco tu frente

Laura. M dijo...

Que la esperqanza no nos falte nunca amigo, malo cuando la perdemos del todo. Saldremos de esto y lo recordaremos como un mal sueño.
Cuídate Carlos.
Desde casa te mando este abrazo 🙅

Lia dijo...

Cuantas veces nos quisimos morir escuchando boleros...por suerte no lo hicimos...bello relato. Un beso Lía.

Adelina dijo...

Todo es posible en la desesperación de un horizonte tan negro e incierto. Al final todo da igual, si nada de lo de alrededor sonríe...

Escribes divino. Un lujo siempre, cuando vengo a leerte. Muchos besos.

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Trágico final de una vida en tiempos de pandemia, la soledad e incertidumbre agobian.

Tu relato me hizo recordar al sastre de mi pueblo, que por allá en los años sesenta con ventanas y puertas del local abiertas, amaneció bañado en sangre recostado sobre la máquina Singer.

Un abrazo.

Tesa Medina dijo...

La soledad que se hace más soledad confinada, sin redes, con los hilos rotos, ya no hay nadie al otro extremo que los mueva. Nadie puede seguir navegando con sentido si no hay un puerto adonde quiera llegar.

Un relato excelente, Carlos, muy visual y cinematográfico, y ese bolero sonando de fondo... me gustó mucho.

Un abrazo, me encanta volver a reencontrarme con tu Arte y disfrutarlo.