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miércoles, 26 de octubre de 2011

Mallas rotas






Cuando vi aquella mujer saltibanqui con las medias desvencijadas, recorrer en  zancos el pueblo, promocionando un circo de leones viejos,  carpa parcheada, y sillas desportilladas, que se había instalado en un potrero roñoso de las afueras del pueblo, se me vino de un ramalazo la infancia, y el recuerdo dulce de la trapecista de mallas rotas, que me dio el primer beso, mientras me perdía en el cielo de su mirada.

15 comentarios:

Úrsula Iguarán dijo...

Qué nostalgia la de los circos. Sugestivo y mágico relato, carlos. UN abrazo

Alicia Abatilli dijo...

Hola Carlos Augusto. Placer leerte.
Esas mallas por las que se cuela la esperanza y a veces mucho más.
Abrazos.
Alicia

la MaLquEridA dijo...

Y se fue pa´ otro pueblo con sus mallas rotas y tus sueños pegados a sus pestañas.



Besos Carlos.

Mercedes Cardona dijo...

MIS PENSAMIENTOS. MERCE CARDONA.

Dice. bonito y tragico poema, los circos no se porque siempre me han causado una especie de pena, si te adentras dentro de el y los personajes no todo es tan facil, la convivincia es muy dificil.

Agradezco que pases a leerme, me da ánimos para seguir.

Besos en la distancia

Sandra Figueroa dijo...

Hola Carlos, bello poema. Los circos no me gustan, me dan tristeza. Besos, cuidate.

Ricardo Miñana dijo...

Hola Carlos, de pequeños solíamos ir al circo, con el paso del tiempo las costumbres se pierden, ahora miramos hacia otras cosas.
feliz semana.

Carlobito dijo...

Lindos recuerdos.

Me hiciste recordar a una amiga que se escapó con un payaso cuando todavía era una niña, estaba muy enamorada, tanto que soporto la vida del circo por un buen tiempo.

Saludos.

ArteDeAmar dijo...

De pueblo en pueblo , despertando sueños con sus mallas rotas.
Nostalgicos versos.
Besitos de Arte.

Alma Mateos Taborda dijo...

Me has recordado los circos que siempre se instalaban en mi pueblo natal, pobres pero con grandes trapecistas. Un abrazo.

Liliana G. dijo...

Unas mallas rotas que no pudieron romper ni los sueños ni los recuerdos. Esa es la magia del circo y de la vida.

Un beso grande, Carlos.

Anónimo dijo...

FULLLL, MUY EVOCADOR, CONVERJO CON ESAS IMÁGENES. MUCHAS VECES LAS VIVÍ EN MI PUEBLO.
UN ABRAZO

Verónica O.M. dijo...

Muy bonito escrito, Carlos y el primer beso es muy especial, jamás lo olvidamos (si nos riega bien el cerebro) jaja.
Buen finde
Un fuerte abrazo

memetika dijo...

Breve y hermoso, como un malto mortal de trapecista. muy bueno, salud

Jéssica Vilardi dijo...

Hermosamente mágico, y es sorprendente que entre aquella miseria implacable, le sonriera la vida con un beso que lo elevara por los cielos.

Un abrazo. Extraño que pases por mi casa.

Con cariño, Jéssica Vilardi

mariarosa dijo...

Carlos que lindo. Admiro tu saber decir en pocas palabras lo que lleva tiempo y vida. Hermoso.

mariarosa