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viernes, 15 de septiembre de 2017

La ciudad abrasada

Me asomo a la ciudad, 
en el sol fuerte del mediodía, 
y se derrite en un vaho que ahoga el pecho, 
y niega la sonrisa. 
Cómo tener algo de gracia 
en esta hora donde hierve 
hasta el alma. 
Yo casi,
ni me reconozco, 
tampoco a los otros, 
menos a mi ellos 
Somos sombras sin cuerpo, 
caminando sonámbulos 
por las calles y avenidas de una ciudad, 
a la cual el sol ha puesto en llamas, 
en esa hora 
en que nos sentamos a almorzar, 
y a conversar la vida



Foto propia: Cañaveral, Floridablanca, Santander (Colombia)


32 comentarios:

Rafa Hernández dijo...

Eso es lo que podemos ver en cualquier gran ciudad,y sobre todo en verano. Un sol abrasador que derrite hasta el asfalto; gente caminando como zombis a veces hasta sin saber adónde se dirijen y mucho borrego con muy mala uva. Yo muchas veces envidio a la gente de pueblos pequeños, ya que son más felices, viven con menos polución, y tienen mejor trato.Las grandes urbes hierben, hay mucha maldad, y si te da un jamacuco, hasta puedes morirte porque nadie te auxilia.

Fuerte abrazo Carlos.

mariarosa dijo...


El verano se acerca suavemente en mi ciudad y tus versos parecen anunciar lo que nos espera. Poesía sobre una realidad que nos envuelve y nos va despersonalizando.
Muy bueno Carlos.

mariarosa

SÓLO EL AMOR ES REAL dijo...

Y aún más y más calientes y menos y menos humanos seremos... Pero por fortuna siempre hay buenas excepciones

Luz&Amistad

Isaac

Verónica O.M. dijo...

Qué bien has definido esos días asfixiantes.
Un abrazo, buen fin de semana

Rosana Martí dijo...

En ocasiones la ciudad ahoga todo sentido palpable, te carga generando así un malestar que bien has descrito en tus letras. Un abrazo, acaba de pasar un lindo fin de semana.

Clarisa T. dijo...

El semblante de las ciudades no es otro, que el que los que las habitan, le pintan. Hay ciudades que parecen féretros, cierto. Sin embargo, "todo es del color con el que se mira", dicen... Al fin y al cabo, no son más que nuestro propio espejo. Muy conmovedor tu poema: razones por las que, a veces, caminamos con los brazos caídos, viendo el lado feo de las cosas, quizá como el reflejo de una tristeza oculta.
Un abrazo. ¡Salud!

chusa dijo...

puedo imaginar ese bochorno, el ambiente envuelto en una especie de somnolencia que deja a los habitantes inánimes. Será real, será una pesadilla?
un placer leerte Carlos,
felices días, un abrazo hasta tu bella Colombia
Chusa

CHARO dijo...

Cuando el sol nos "castiga" con ese calor sofocante se hace muy dificil poder aguantarlo pero al menos ha servido para que te inspirara esta poema.Saudos cordiales

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

"Conversar la vida", suena muy esperanzador... aunque agobie el calor.

Un abrazo.

lichazul dijo...

zombies achicharrados
marcando el paso en la rutina del sistema moderno
es el precio
es el yugo dorado
es la libertad en la comodidad
es la somnolencia de la voluntad

abrazos

soco luis fernandez dijo...


En esas horas de calor asfixiante, mejor que conversar la vida, será soportar la vida.

Buen poema, Carlos, se hace sentir.

Abrazo fresquito.

Nino dijo...

Hola, Carlos:
Enhorabuena por tu poema.
Me atrae sobre todo el positivismo que encuentro en él, el que pese al deambular sonámbulos por un entorno que niega la sonrisa, encontremos un momento para sentarnos y conversar la vida.
Un abrazo, Carlos.

Mara dijo...

A pesar del calor me quedo con "nos sentamos a almorzar,
y a conversar la vida" .¡Qué bonito!Saludos.

Recomenzar dijo...

Me gusta el almuerzo . Los mariscos frescos un violín muy viejo que no deja de sonar....
Tu mirada ausente se clava en la mía... mientras un vino rosado nos invita a amar



CÉU dijo...

Hola, Carlos!

Mi gustam as cidades calientes, el verano, pke todo es mas livre y descomplexado.
Vamos, entonces, almoçar (sonrisas).

Besos.

Smareis dijo...

Seus texto me faz lembrar dos dias calorento que esta chegando na minha cidade. Aqui é verão quase o ano todo. A primavera já chegando trazendo um calor sufocante por aqui.
Uma continuação de boa semana Carlos.
Beijo!

Anónimo dijo...

Germina una sombra meridiana, valiente compañía que me conversa sin distinguir sonrisas.
Carlos muchas gracias por compartir sus escritos, gracias por conversar la vida.

Jova dijo...

Pues claro jaja con tanto sol las ropas se pegan al cuerpo y hay una sensación desagradable. Aunque tú lo cuentas muy bonito. Saludos

Existe Sempre Um Lugar dijo...

Boa tarde, ao meio dia em dias de calor, somos sombras sem corpo absorvidos pela exagerada temperatura, o poema é belo.
Continuação de boa semana,
AG

Rud dijo...

Hola, Carlos
Huyo del sol abrasador, deshidrata en cuestión de segundos y a esa hora es más dañino para la salud de la piel. El antídoto: ropa adecuada, almorzar bajo la bella sombra de los árboles :)
Feliz fin de semana, un abrazo

Beatriz Martín dijo...

uufff a veces ese cemtno de la ciudad nos ahoga y nos abruma, y nos olvidamos de esa estrela del sol maravillosoque nos ilumina y nos quejamos nos parece la ciudad pesada, precioso Carlos un beso desde mi brillo del mar

Doris Dolly dijo...

Carlos ....a conversar la vida, a recordar momentosssss
que bonito lo que dices.

Un beso

ოᕱᏒᎥꂅ dijo...

hablas de Córdoba??
besos

SILO LÍRICO - Poemas, Contos, Crônicas e outros textos literários. dijo...

Carlos, no imaginaba que tan caliente fuera ahí, a la primavera. Me imagino el verano de sol la clavija con es en la línea del ecuador. Debe ser muy difícil de soportar el sol de mediodía. Pero como dice a Cielo: hay amor y hay poesía y por lo tanto, vamos a almorzar con el calor de la libertad del despojarse de todo. Gran abrazo. Laerte.

Zilani Célia dijo...

OI CARLOS!
PRIMEIRA VEZ AQUI, ACHEI TEU TEXTO BELÍSSIMO E RESOLVI FICAR.
ABRÇS
http://zilanicelia.blogspot.com.br/

Ateliê Tribo de Judá dijo...

Olá meu querido,
Sempre existe um charme em cada estação do ano, mas existem lugares onde as estações são extremas, aqui no Brasil por exemplo vivemos em um país com dimensões continentais então conhecemos bem os extremos Sertão semiárido ou Zona da mata por exemplo,mas o que encanta é que podemos desfrutar de saborosos pratos da culinária local e o carinho do povo compõem um rica experiência e se estivermos em boa companhia então....rss
Amei seu texto e até deu vontade de viajar....onde moro atualmente é muito frio, boa ideia é fazer como os pássaros que migram .
Desejo-lhe brisas que te levem carinho a alma.
beijos
Joelma

Marina Filgueira dijo...


¡Hola Carlos!!!

Siento en tus letras un desaliento terrible, no me parece que el sol sea el culpable.
Pero si el huracán que hizo arrasos por tierras caribeñas y me temo que también Colombia haya podido ser victima del María e Irma, si es así, ¡Lo siento en el alma! Amigo, Carlos.
Bien sé por las noticias que ha hecho verdaderos estragos desolando los países sudamericanos, contra la naturaleza poco se puede hacer y además lo pagan lo pueblos mas humildes puesto que sus casas son de construcción muy precaria. Es una injusticia todo el mundo debería tener una casa en condiones.

Un abrazo, amigo: y adelante que dichosos los que salvaron la vida el resto aunque sea difícil tiene arreglo.

Gracias por tu huella.

Alicia Abatilli dijo...

Hay almas que no pueden hervir. A penas si gotean.
Abrazos. Es bueno leerte.

Sneyder C. dijo...

Es agobiante sentir en verano el asfixiante calor que emerge del asfalto, que hace sentir como el corazón parece que valla a detenerse…

Un cálido abrazo Carlos

Lia Noronha dijo...

Que belo!!!
Abrazos

Recomenzar dijo...

cuanta nostalgia albergas en tu alma
caballero que le canta al amor
de la vida y de una mujer...o muchas no importa
Te dejo un abrazo desde mi madrugada poeta de la nostalgia de un alma que se enamora de la pasión alada

Isa dijo...

Hola Carlos. Es lo que tienen muchos lugares, que nadie conoce a nadie. O se niega el saludo.
Cuando el calor aprieta, lo mejor es estar dentro de casa al frescor, y a la noche cuando el sol se haya escondido, pues hablar de la vida en cualquier rincón que elijamos.
Deseo que estés bien y no te haya afectado esos temporales.
Abrazosssssss