Cuando vi aquella mujer saltibanqui con las medias desvencijadas, recorrer en zancos el pueblo, promocionando un circo de leones viejos, carpa parcheada, y sillas desportilladas, que se había instalado en un potrero roñoso de las afueras del pueblo, se me vino de un ramalazo la infancia, y el recuerdo dulce de la trapecista de mallas rotas, que me dio el primer beso, mientras me perdía en el cielo de su mirada.
Qué nostalgia la de los circos. Sugestivo y mágico relato, carlos. UN abrazo
ResponderEliminarHola Carlos Augusto. Placer leerte.
ResponderEliminarEsas mallas por las que se cuela la esperanza y a veces mucho más.
Abrazos.
Alicia
Y se fue pa´ otro pueblo con sus mallas rotas y tus sueños pegados a sus pestañas.
ResponderEliminarBesos Carlos.
MIS PENSAMIENTOS. MERCE CARDONA.
ResponderEliminarDice. bonito y tragico poema, los circos no se porque siempre me han causado una especie de pena, si te adentras dentro de el y los personajes no todo es tan facil, la convivincia es muy dificil.
Agradezco que pases a leerme, me da ánimos para seguir.
Besos en la distancia
Hola Carlos, bello poema. Los circos no me gustan, me dan tristeza. Besos, cuidate.
ResponderEliminarHola Carlos, de pequeños solíamos ir al circo, con el paso del tiempo las costumbres se pierden, ahora miramos hacia otras cosas.
ResponderEliminarfeliz semana.
Lindos recuerdos.
ResponderEliminarMe hiciste recordar a una amiga que se escapó con un payaso cuando todavía era una niña, estaba muy enamorada, tanto que soporto la vida del circo por un buen tiempo.
Saludos.
De pueblo en pueblo , despertando sueños con sus mallas rotas.
ResponderEliminarNostalgicos versos.
Besitos de Arte.
Me has recordado los circos que siempre se instalaban en mi pueblo natal, pobres pero con grandes trapecistas. Un abrazo.
ResponderEliminarUnas mallas rotas que no pudieron romper ni los sueños ni los recuerdos. Esa es la magia del circo y de la vida.
ResponderEliminarUn beso grande, Carlos.
FULLLL, MUY EVOCADOR, CONVERJO CON ESAS IMÁGENES. MUCHAS VECES LAS VIVÍ EN MI PUEBLO.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Muy bonito escrito, Carlos y el primer beso es muy especial, jamás lo olvidamos (si nos riega bien el cerebro) jaja.
ResponderEliminarBuen finde
Un fuerte abrazo
Breve y hermoso, como un malto mortal de trapecista. muy bueno, salud
ResponderEliminarHermosamente mágico, y es sorprendente que entre aquella miseria implacable, le sonriera la vida con un beso que lo elevara por los cielos.
ResponderEliminarUn abrazo. Extraño que pases por mi casa.
Con cariño, Jéssica Vilardi
Carlos que lindo. Admiro tu saber decir en pocas palabras lo que lleva tiempo y vida. Hermoso.
ResponderEliminarmariarosa