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martes, 1 de julio de 2025

Tiro En la frente (cuento)







Alcanzó a correr unas cuantas cuadras, con el balazo de la carabina en la cadera. Trató de refugiarse en el antejardín de una vieja casona, que aún se mantenía en pie, entre los rosales. Sintió la sangre que le escurría por la pierna, y el pantalón empapado. Le molestaba el olor a sangre. La primera vez que recibió ese olor hostil, cuando en una de las operaciones , uno de sus compinches se desangró por un tiro en la femoral, casi se vomita

Ahora era él, el que sangraba, y repugnaba el olor de su propia sangre fluyendo como una llave rota, viscosa y detestable. Fue entrando en una especie de sopor y cayó de espaldas en el césped. Cuando sintió el frío de la carabina en la frente, ya tenía la mirada borrosa, pero creyó adivinar en el hombre de la carabina, un gesto de satisfacción,antes de que apretara de nuevo el gatillo. 

29 comentarios:

Solo Yo dijo...

mala muerte tuvo

Ester dijo...

Menos mal que le dio tiempo a escribir la historia, la sangre huele a hierro . Abrazo

mariarosa dijo...

La guerra y sus historias tan cercanas a la realidad, duelen, impresionan, son un cuento que està sucediendo en alguna parte de este mundo cruel.
Muy bueno Carlos.
Abrazo.

São dijo...

Neste preciso momento este teu conto está sendo vivido por alguém no horror das chacinas.

Beso.

Momentos dijo...

Carlos, un relato real, en algún lugar del mundo esta pasando.
Abrazos

CHARO dijo...

He sentido escalofríos al leer tu relato.Saludos

María dijo...

La guerra tan fría, tan cruel, tan dura, y tanta sangre derramada, tantas personas muertas. Aunque sea un relato, es tan certero como la vida misma, Carlos. Impresionante imaginar las escenas que has escrito.

Un abrazo.

Macondo dijo...

No sé quién le puso de nombre "tiro de gracia", porque maldita la gracia que tiene. Claro que sin se supone que es para pasar a "mejor vida", cuando la que te queda no es muy prometedora, igual tiene sentido.

Marisa Alonso Santamaría dijo...

La realidad siempre supera la ficción.
Dejo una nueva entrada en mi blog.
Un saludo, Carlos

CRISTINA dijo...

Hola Carlos, parece que estába viendo una noticia tan actual en estos momentos. Este relato ahora mismo, es tan real, y a la vez, tan triste.
Un abrazo

carlos perrotti dijo...

Impresionante crudo pero poético relato. Me fascina la angulación que elegiste para contarlo... y los sentidos a los que apelás para que el lector pueda captarlo.
Abrazo hasta vos, admirado!!

Cabrónidas dijo...

¿Por qué estarían luchando? ¿Qué estarían defendiendo? A lo mejor ni ellos dos lo saben.

Alfred dijo...

Pudo dejar la crónica de su muerte, a saber por qué causa.
Un saludo.

Teo Revilla Bravo dijo...

Un relato que hace temblar, amigo Carlos. Con qué maestría nos lo presentas, nos lo cuentas, nos animas a ponernos en situación y reflexionar.
Un inmenso abrazo desde el caluroso estío barcelonés.

BEATRIZ dijo...

A mi también me incomoda el olor a sangre... está brutal.
Saludos, Carlos.

María dijo...

La sangre huele tan intenso como denso es su color rojo impregnante ..Describes magistralmente una terrible imagen q desgraciadamente seguro es habitual en alguna de las muchas guerras q devastan este planeta ... Quizá es tiro final le dio por fin la paz con la q no vivió..Demasiado dolor inexplicable! un abrazo muy fuerte y un placer leerte CARLOS AUGUSTO!

Manuel dijo...

Si su compinche y él, han sido tiroteados es que andan jugando con fuego, y en esta ocasión se quemó...y como dice el refrán que el que por su gusto muere, hasta la muerte le sabe a gloria, así que ese tiro de gracia, lo mismo le hizo un favor.
Me ha encantado tu intrigante relato.
Un fuerte abrazo, amigo Carlos.

José A. García dijo...

Pocos se resisten a rematar a un muerto...

Saludos,
J.

Dionisio Álvarez T. (DAT) dijo...

Hola Carlos, satisfacer el EGO ante la dispuesta acción de eliminar al ser indefenso...es toda una saña y una cruel cobardía. Feliz domingo
Un abrazo

Teo Revilla Bravo dijo...

Un abrazo. Gracias por tu comentario en mi pequeño rincón.

Graça Pires dijo...

Nestes tempos de guerra alguém morrerá do mesmo modo e já não sofrerá indignamente.
Gostei do seu conto. Pareceu-me estar a ver um filme.
Uma boa semana.
Um beijo.

Momentos dijo...

Gracias Carlos por visitar mis blog.
Besos

Frodo dijo...

Áspero relato, despiadado. Pero no por ello falto de belleza.
Me ha encantado cómo está descripta la situación en tan pocas palabras, creo que he podido sentir el olor de esa sangre al fluir, y las crudas sensaciones de terror, fatiga y posterior alivio del personaje.

ABrazo grande, desde el fresco y políticamente demencial Río de la Plata

MUCHA dijo...

Maravillosa entrada'Abrazos

Recomenzar dijo...

Me asombra muchas veces la infinita magia de los blogs
es por esp que vuelvo y me voy.
Abrazos siempre

Majo Dutra dijo...

Un francotirador tiene armas de largo alcance y no necesita acercarse al enemigo.
Creo que sería mejor aplicarle el torniquete en su pierna, pero es él que sabe...
El joven de la imagen está muy mal camuflado; su rostro es un objetivo de tiro perfecto...
Por desgracia, ocurre mucho últimamente y es un tema interesante.
Gostei de ler, Carlos Augusto.
Um abraço, Amigo.
~~~~

lichazul dijo...

buen relato Carlos, para tiempos de pólvora y llantos

abrazos

A Casa Madeira dijo...

Um conto muito atual em algum lugar neste globo terrestre.
Boa continuação de semana.

Kinga K. dijo...

La guerra es aterredora :/