De pronto ya no necesites verlas en el cielo, porque las llevas contigo y tus ojos podrán reflejarlas y a través de ellos todos podremos verlas. Estoy segura que el personaje creció en intensidad y ya no necesita el cielo... el cielo es su esencia ahora. Un abrazo inmenso. Te sigo leyendo
Este es un bello y, a su vez, nostálgico micro que nos pone en esa frontera de lo humano: lo que fue ayer ya no lo es hoy, entera o parcialmente. La foto es impactante! Recibe mi abrazo y mi admiración.
Es la nostalgia por una etapa que pasó , llevándose quizás muchas otras cosas, además de esas estrellas espléndidas, candorosas y brillantes como no hay otras.Cariños
Tus palabras me han llevado a un pasaje de mi vida igual al que comentas, he ido a visitar un lugar donde he pasado un tiempo y no lo vi como entonces, todo era opaco. Gracias por compartir tus letras
Hola Carlos, un minicuento que nos lleva a que nada es eterno. Cuando hemos perdido las ganas de seguir soñando, todo se hace imposible. No dejemos nunca de ser niños si no queremos estar desencantados de la vida. La foto muy buena. Hay que crecer fisicamente, pero también mentalmente, aun sin dejar de ser ocasionalmente de mente infantil y que aun nos siga quedando un poquito de inocencia para no perder el encanto de las cosas. Saludos y besos
Bellas y nostálgicas letras nos obsequias querido y admirado poeta. Infinitas gracias por concedernos el privilegio de ser testigos de estas. Muchos besinos y feliz fin de semana te desea esta amiga con inmenso cariño. ♫♫•*¨*•♫♫
Aunque en la madurez se ven las cosas desde la realidad, yo quiero seguir viendo las estrellas, yo no quiero perder parte de esa niña que habita en mi interior, yo alguna vez suelo ver esas estrellas cuando sueño.
Carlos , quiero decirte que aún a pesar de no ser niños, podemos recrearnos, y ver las estrellas , aquellas que cuelgan del hilo negro, Te invito a mirar esta noche el cielo...
el crecer y madurar implica lamentablemente muchas pérdidas irreparables
ResponderEliminarintenso micro, la foto genial
abrazos y buena semana CArlos
Tal vez no estabas mirando el cielo.
ResponderEliminarNoche oscura del alma...
ResponderEliminarBesos, Carlos, y que no decrezcan la ilusión y los sueños.
La niñez no volverá, la añoranza recordará quien fui.
ResponderEliminarUn beso
Triste, pero tan bello a la vez..
ResponderEliminarDe pronto ya no necesites verlas en el cielo, porque las llevas contigo y tus ojos podrán reflejarlas y a través de ellos todos podremos verlas.
ResponderEliminarEstoy segura que el personaje creció en intensidad y ya no necesita el cielo... el cielo es su esencia ahora.
Un abrazo inmenso. Te sigo leyendo
UFFFFFF, TREMEDISIMO TEXTO!!!! GENIAL.
ResponderEliminarUN ABRAZO
En la inocente niñez solemos alcanzar estrellas... ya maduros las estrellas suelen ser inalcanzables.
ResponderEliminarHermoso pensamiento, te dejo un fuerte abrazo!
Carlos:
ResponderEliminarEste es un bello y, a su vez, nostálgico micro que nos pone en esa frontera de lo humano: lo que fue ayer ya no lo es hoy, entera o parcialmente.
La foto es impactante!
Recibe mi abrazo y mi admiración.
qué triste perder las estrellas en la madurez... te envío de regalo un cielo estrellado!!!
ResponderEliminarNi un atisbo de inocencia. Queda la noche.
ResponderEliminarSaludos
Es la nostalgia por una etapa que pasó , llevándose quizás muchas otras cosas, además de esas estrellas espléndidas, candorosas y brillantes como no hay otras.Cariños
ResponderEliminarYa no era lo mismo.
ResponderEliminarCarlos " Desencanto "
ResponderEliminarTus palabras me han llevado a un pasaje de mi vida igual al que comentas, he ido a visitar un lugar donde he pasado un tiempo y no lo vi como entonces, todo era opaco.
Gracias por compartir tus letras
un beso desde Argentina
Hola Carlos, un minicuento que nos lleva a que nada es eterno.
ResponderEliminarCuando hemos perdido las ganas de seguir soñando, todo se hace imposible. No dejemos nunca de ser niños si no queremos estar desencantados de la vida.
La foto muy buena. Hay que crecer fisicamente, pero también mentalmente, aun sin dejar de ser ocasionalmente de mente infantil y que aun nos siga quedando un poquito de inocencia para no perder el encanto de las cosas.
Saludos y besos
De grandes vemos la realidad y todo es diferente. Ni el cielo es igual, hasta las estrellas parecen más altas.
ResponderEliminarmariarosa
Esas estrellas que veias sólo de ven de niño,querido amigo.
ResponderEliminarUn abrazo.
De niño se ven todas las estrellas, pero con los años el firmamento se vuelve opaco...
ResponderEliminarUn cálido abrazo
A veces no hay estrellas, pero no significa que no las vaya a volver a haber...
ResponderEliminarUn beso
Hola, Carlos:
ResponderEliminarTienes una gran facilidad para decir muchas cosas en dos o tres palabras...
Pero, sin embargo, seguiré mirando el cielo.
Un abrazo.
Mui belo, uma boa noite com o perfume das flores!
ResponderEliminarBellas y nostálgicas letras nos obsequias querido y admirado poeta. Infinitas gracias por concedernos el privilegio de ser testigos de estas. Muchos besinos y feliz fin de semana te desea esta amiga con inmenso cariño. ♫♫•*¨*•♫♫
ResponderEliminargraciaspor tu huella
ResponderEliminarfeliz finde
Aunque en la madurez se ven las cosas desde la realidad, yo quiero seguir viendo las estrellas, yo no quiero perder parte de esa niña que habita en mi interior, yo alguna vez suelo ver esas estrellas cuando sueño.
ResponderEliminarAmigo Carlos, es tan bello todo lo que escribes.
Un beso grande.
Carlos , quiero decirte que aún a pesar de no ser niños, podemos recrearnos, y ver las estrellas , aquellas que cuelgan del hilo negro, Te invito a mirar esta noche el cielo...
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ResponderEliminarMIS PENSAMIENTOS. MERCE CARDONA.
Dice. Agradezco tu visita. En pocas palabras haces una gran narración.
Besossssssssssssss
Nostalgias buscadas nas estrelas...
ResponderEliminarBeijos.
o nuestros ojos ya no las codifican
ResponderEliminary las estrellas se apagaron al crecer el ser como persona, y es una pena dejar en el camino los sueños y el candor.
ResponderEliminarsaluditos.
bss